Dios
todopoderoso,
que en el monte Sinaí diste a Moisés la Ley antigua
en medio del resplandor del fuego,
y hoy manifestaste la nueva Alianza
con el fuego del Espíritu Santo;
concede que nuestros corazones
ardan siempre en aquel mismo Espíritu
que derramaste de modo admirable sobre tus apóstoles,
y la Iglesia, congregada de entre todos los pueblos,
reciba con alegría el mandamiento de tu amor.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario