“El
silencio consiste, no por cierto en no decir nada, sino en poner una custodia a
la boca (Sal.39;2) y rodear los
labios de una clausura, a fin de hablar (1.) cómo y cuándo (quomodo et quando) es necesario, (2.) dónde
y cuándo (ubi et quando) se debe,
(3.) qué cosa y por qué motivos (quid
et unde). Hay, pues, un tiempo para hablar y otro para callar (Ec.3:7)”. Adam de Perseigne [+1221], Ep 29.
No hay comentarios:
Publicar un comentario